El pacto de confidencialidad debe establecer claramente qué se entiende por información confidencial.
Debe establecer en forma precisa y clara, cuáles son los medios, recursos o información que se pone a disposición del trabajador.
La cláusula de confidencialidad debe establecer expresamente la obligación de secreto y confidencialidad.
Debe establecer la obligación de restituir al empleador la información confidencial a la que se ha tenido acceso con ocasión de la relación laboral al momento que termine la relación contractual.
Debe establecer que a pesar de la terminación de la relación contractual, la obligación de confidencialidad y secreto permanecerá vigente durante un plazo, el que será establecido por las partes, la práctica habitual es establecer un plazo de 2 años después de finalizada la relación contractual.
Es muy importante que informe de las consecuencias que pueden traer en su contra al trabajador o empleado, producto del incumplimiento de dicha obligación de confidencialidad y secreto, esto como una forma de disuadir al trabajador para que no revele la información.